Todo
o casi todo diría
me conduce hasta ti.
Ahora...
me pregunto:
¿Por qué?
si ni siquiera
nos hemos conocido.
Luego esgrimo
la respuesta
-o intento al menos-
es el alma,
esa alma primigenia
ostenta itinerario propio,
prescinde
hasta de la mente
y posee una brújula propia
que es infalible.
Hoy,
una alfombra
de macilentas hojas
de un sauce llorón
trajeron tu recuerdo
otra vez, como siempre
y aquí estoy
dirimiendo a solas
si te hospedo
definitivamente
entre mis remembranzas
o en olvido
irremediable
y definitivo te convierto.
¿Te hospedo o te olvido?
Viviana Laura Castagno Fuentes



















