Cuando mis ímpetus
sufren una declinación
natural y saludable,
comienzo un viaje hacia adentro
donde poseo un hogar
encendido con recuerdos
que demandan ser atizados
para que el amor se renueve.
Se produce allí un reencuentro
entre los sentimientos todos
que silenciosos estaban,
por necesidad...
o tal vez por actitud,
porque decidieron entre todos
no hacer ningún ruido
mientras estaban sanando.
Viviana Laura Castagno Fuentes

