Los días aquellos del estío
han quedado tan lejanos,
hubo un acuerdo tácito
para arrancar los meses
de un calendario
que no existe en realidad,
porque es imaginación
solamente.
Pero, a pesar de ello
te has acercado
más todavía
desafiando todo,
no existen fronteras
ni límites, ni tiempo,
es atemporal
el amor que tenemos
lo supimos construir
con la solidez
y la contundencia
que hace languidecer
a los tramposos
amores románticos
que tienen a la carne
como piedra basal
de su existencia.
No, el nuestro
se ha eternizado
porque es un sobreviviente
con sesgos de pureza,
nada ni nadie
podrá con él
porque está cincelado
en los entresijos
que nuestras almas
amorosamente
para él, han esculpido.
Lo nuestro
no prescribió
ni prescribirá nunca,
porque no se esfuman
los amores preciosos
que en la fuente
de lo genuino
y de la magnanimidad
han abrevado.
Viviana Laura Castagno Fuentes
