Me iré de este mundo
a sabiendas
de que no hubo
evolución alguna
porque la maledicencia
continúa su derrotero.
Y se naturaliza la crueldad
y se expande la mentira
con el aval de la mayoría
que está cómoda
y por los dogmas ofuscada.
Y en el medio...
están siendo alienados cada día
por una tecnología
que los disciplina
y en esclavos voluntarios
los convierte.
No hubo evolución
—ni habrá—
porque desertó el género humano
a los valores que lo humaniza
en aras de una carrera estéril
por bienes y posesiones.
Viviana Laura Castagno Fuentes