Me oprime
el mandato absurdo
de blandir la felicidad
como si fuese obligatorio,
no estoy feliz ahora
ni lo estaré
en los días que se acercan
—extraño a mi madre—
y no me harán sentir culpable
porque han instalado
al positivismo como dogma.
Bienvenidos a este universo donde "La Poesía" les propone viajar hacia las profundidades del alma. Deseo que ese viaje sea ameno y los invite a regresar siempre. Muchas gracias por visitar este espacio.
Me oprime
el mandato absurdo
de blandir la felicidad
como si fuese obligatorio,
no estoy feliz ahora
ni lo estaré
en los días que se acercan
—extraño a mi madre—
y no me harán sentir culpable
porque han instalado
al positivismo como dogma.
Necesito otra vida
porque esta es insuficiente,
creo que no he aprendido
lo que me está demandando
este viaje con sus imponderables
y estoy temiendo llegar tarde
cuando la muerte por mí venga.
Encuentro tus vestigios
aquí, allá, en todas partes,
no escatimas nada te aseguro
induces a la natura
la invitas con tu sobriedad
para que me convenza
y ella se esmera
acicatea sus estrategias
para disuadirme cuando dubito.
¿Y sabes algo?
lo logras con eficiencia,
porque los recuerdos
se imponen, crecen
y se vigorizan cada día,
no hay espacio
para el olvido
porque te has asilado
en un lugar de privilegio
donde solamente viven
lo que jamás se fueron.