DESCONCERTADA

Me genera un cierto desencanto, una rebelión interna y también una gran desazón el universo de la virtualidad y sus parámetros que están escindidos de los míos.

Muchas veces me siento una rehén voluntaria —porque de hecho elijo escribir en este medio—, pero me frustra tanta exigencia, porque me excede y me incomoda, no me siento libre. 

Y si a eso le agrego que "la instantaneidad" —es lo que goza de cierto éxito—, escribir es un desafío que carece de un puerto seguro en un mar donde los naufragios abundan.

Viviana Laura Castagno Fuentes 

MI PAZ

Muchas veces he callado, pero no por cobardía ni timidez, sino porque establecer un diálogo prolífico y fluido — se ha vuelto una tarea harto imposible— y preferí enmudecer.

Hay personas que solamente desean —tener razón—, no saben o no les interesa ingresar en el rico universo para escuchar al otro y abrevar en diferentes posturas o concepciones que muchas veces nos enriquecen y/o nos modifican.

Mis padres no me impusieron ninguna religión, tampoco elegí alguna, mantengo una lejanía con todas y ninguna me seduce, no creo en ningún conglomerado de dogmas donde los mismos dominan, sojuzgan y nivelan, aunque respeto a los creyentes, pero no me siento respetada. 

Por eso, elijo irme —por dentro y por fuera— cuando el diálogo se torna una tarea infructuosa y compleja, porque a la razón la tiene siempre el otro mientras socava la posibilidad exquisita del entendimiento. 

Es que a cierta edad, hay que priorizar la paz, no me interesa —tener razón—, solamente aprendí a ceder para salvar lo que aún queda de mí. 

Viviana Laura Castagno Fuentes 

LENGUAJE "INCLUSIVO"

Comparto con ustedes este texto maravilloso sobre ese engendro denominado: "lenguaje inclusivo", que solamente—deforma nuestro idioma exquisito— sin generar un cambio profundo en nuestras conductas. 

No conozco al autor, sino lo hubiese enunciado. 

Saludos de Viviana Laura Castagno Fuentes.