Somos naturaleza
con cielo, estrellas, nebulosas,
piélagos inconmensurables,
somos una copia inexacta
del vastísimo universo.
Somos intrépidas cascadas
un amasijo de sentimientos,
somos un amoroso río dúctil
que sabe ser espejo
cuando los vientos cesan.
Somos la férrea piedra
inerte, esculpida, cincelada
pero cuando los imponderables
—aparecen y nos desafían—
despabilan energías que duermen.
Somos gritos petrificados,
somos la sonrisa forzada
el empecinamiento perpetuo
la equivocación reiterada
para enmudecer al alma.
Somos una apariencia
una cáscara, un continente,
somos luces titilando
hogueras que se extinguen
somos preguntas, sin respuestas.
Somos la eterna mascarada
la simulación absurda, la finta,
la mentira vil y prosaica
el desgaste innecesario
para eclipsar nuestra esencia.
Viviana Laura Castagno Fuentes
