Se diferencia el estío,
posee sus peculiaridades
se impone el osado
con la versatilidad
de los cambios
y se empotra en el cuerpo.
Si hasta parece
que posee garras el dúctil,
cuando el calor arrecia
y a la piel lacera
sin piedad alguna.
Se diferencia el estío,
devora con su implacable fuego
a esplendorosos vergeles
mutando tanta belleza
en figuras mustias y
fantasmagóricas.
Se diferencia de todas
las estaciones,
tiene potestades únicas
estruja la plenitud de los verdores,
mientras les obliga a desplegar
todos los dones de supervivencia.
Se diferencia el estío...
Viviana Laura Castagno Fuentes

