Me he perdido,
mis pies demandaban
tierra firme,
pero arenas inestables
se impusieron
y tornaron mi caída inevitable.
Y hubo tramos del camino
que ostentaban
precarias sinuosidades,
pero otros,
suaves valles se volvían,
haciendo un paraíso de la travesía.
Accidentes naturales,
fiordos empinados y escabrosos,
prados alfombrados
por diminutas flores silvestres,
bifurcaciones hacia ningún lado,
los caminos son el aprendizaje.
Y he muerto mil veces,
cuando a mi alma atosigaron,
pero otra vez la senda aparecía
y los eclipses totales,
parciales se volvían.
Me he perdido,
y me perderé otras tantas
en tierra firme y arenas inestables,
y me reencontraré de nuevo
sencillamente...
porque la vida es eso.
Viviana Laura Castagno Fuentes