Un tronco leñoso, se ha convertido,
gracias al esfuerzo y la magia,
en una coqueta y amorosa casa,
que los duendes construyeron.
El bosque generoso habilitó
a todas sus especies arbóreas,
para que los duendes eligieran,
y allí está, la obra maestra terminada.
Es preciosa, tiene hasta iluminación,
pergeñada por solícitas luciérnagas,
junto a haditas diseñadoras,
que en conjunto formaron un gran velador,
para que las noches, se parezcan al día.
Hasta un precioso jardín cultivaron,
un sendero con rosas rojas, radiantes ellas,
mientras una enredadera curiosa,
desde el árbol primoroso, se descuelga.
El árbol, los duendes y las hadas, una simbiosis,
cuando hay interés en ayudar, hay modo,
ahora ya tienen su hogar en el bosque,
hasta hay unos hongos con actitud vigilante.
La felicidad está asegurada,
los duendes serán del árbol, sus protectores,
mientras él les provee su cómoda casa,
la fuerza del amor ganó de nuevo,
y eso es lo más maravilloso de todo.
Viviana Laura Castagno Fuentes
gracias al esfuerzo y la magia,
en una coqueta y amorosa casa,
que los duendes construyeron.
El bosque generoso habilitó
a todas sus especies arbóreas,
para que los duendes eligieran,
y allí está, la obra maestra terminada.
Es preciosa, tiene hasta iluminación,
pergeñada por solícitas luciérnagas,
junto a haditas diseñadoras,
que en conjunto formaron un gran velador,
para que las noches, se parezcan al día.
Hasta un precioso jardín cultivaron,
un sendero con rosas rojas, radiantes ellas,
mientras una enredadera curiosa,
desde el árbol primoroso, se descuelga.
El árbol, los duendes y las hadas, una simbiosis,
cuando hay interés en ayudar, hay modo,
ahora ya tienen su hogar en el bosque,
hasta hay unos hongos con actitud vigilante.
La felicidad está asegurada,
los duendes serán del árbol, sus protectores,
mientras él les provee su cómoda casa,
la fuerza del amor ganó de nuevo,
y eso es lo más maravilloso de todo.
Viviana Laura Castagno Fuentes



















