Escribo porque sí
sin huellas que me guíen
sobre un camino aun virgen.
Escribo enmarañada
para organizar mi caos
mientras a la luz enciendo.
Escribo sin pensar siquiera
y sin cuestionamientos
que a mi libertad conculquen.
Escribo herida muchas veces
por las estocadas de la vida
y la cauterización se consolida.
Escribo por necesidad
porque las letras demandan
una liberación acordada.
Escribo mal, bien, regular
—responderá la subjetividad ajena—
pero jamás inhibo ni inhibiré
a mi alma, porque es ella la autora.
Viviana Laura Castagno Fuentes





