Estoy como puedo
no como desearía,
cincelo día a día
con precisión milimétrica
las lágrimas petrificadas.
Estoy como puedo,
mis pasos son férreos a veces
y vacilantes otras,
pero me esmero en seguir
no hay alternativa alguna.
Desearía poseer la estoicidad
de la piedra inerte,
aparenta no sentir nada
-pero mi intuición dicta-
que es una impostura solamente.
O tener la resiliencia
del sauce añoso y mágico
que con admirable solvencia
a los embates de los vientos
desafía y hasta los ignora.
Pero, soy mar inasible
y a estanque plácido muto
la adaptación es permanente
no cesa jamás, no acaba
y no lo hará nunca.
Estoy como puedo
no como desearía,
mi alma es timonel absoluta
de un navío que carece
de destino y derrotero.
Viviana Laura Castagno Fuentes



















