Este amor no se mira
en ningún otro —no podría—
ni siquiera es un sucedáneo
es un edificador de lozanías.
Superó con estoicismo
los declives, sin resbalar siquiera,
llegó exhausto hasta la playa
cuando lo abandonó la marea.
Es un eximio, un asceta,
un recuerdo impertérrito
—que al olvido desafía—
es una orquídea puntual
en una primavera tardía.
Viviana Laura Castagno Fuentes