¿Sabes algo?
A la estepa
interminable
que creció dentro
abduciendo
recónditos espacios,
le he instalado
una primavera
prolífica
sin que lo advierta.
Ahora están conviviendo,
aprendieron
de tus enseñanzas,
de tu arte magistral
para llamar a la calma
cuando el cielo
su inestabilidad
derrumbaba.
¿Y sabes qué?...
El mar que miraba
y admiraba tanto
cuando hasta ti viajaba,
también dentro de mí
vive ahora
y a nadar
en sus procelosas aguas
estoy aprendiendo.
Me has modificado
en todos los aspectos
posibles
y en los imposibles también,
porque ha sido
tan demoledor
el dolor
que me obligó
a cambiar estrategias
que no sirvieron
para nada
o que resultaron insuficientes.
Solamente me resta
agradecer con creces
al universo
por el amor
que me insuflaste
(porque existe
una realidad
incontrastable)
"sin él hubiese sido
una tarea ardua
continuar en este mundo"
y mudarme a otra galaxia
era la única alternativa
que tenía para resarcirme.
Y seguiré así
por un tiempo más supongo,
o por el lapso
que amerite
con mi estepa árida
y mi mar bravío,
porque ellos
están imbuidos
de los dones
que la primavera
les está contagiando,
se irán...
y te confieso
que ni me daré cuenta
porque "tu amor"
determinará "cuándo".
Viviana Laura Castagno Fuentes



















