Se nos quedó el amor
enmascarado,
en el incomparable y sutil
aroma
de las glicinas primaverales.
Se nos quedó aquel día
cuando entre tu solvencia
y mi torpeza manifiesta,
descubrimos otro planeta
donde tuvimos todo
habilitado.
Se nos quedó tal vez
porque así lo quisimos,
lo decidimos sin decidir
es nuestra historia inconclusa,
un principio con final abierto.
Sucede que mutó el amor
y hoy sabe a amistad
indestructible,
cada vez que en tus cartas
esbozas con contundencia
que somos amigas
del alma y de la vida.
Viviana Laura Castagno Fuentes
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