Resiste la aljaba
con sutil estoicismo
los embates suaves
de los fríos otoñales
recién estrenados.
Anhelo que logre
sobrevivir al invierno
cuando sus fauces abra
exhalando sin piedad
gélidos e implacables vientos.
Imagino su reverberar
cuando de pimpollos
sus gajos se tupan,
anunciando el despertar
de la prolífica primavera.
Si ella puede sortear
las exigencias climáticas
llegando incólume al verano
podremos aseverar:
"la resiliencia tiene en la aljaba
a la indiscutible reina".
Viviana Laura Castagno Fuentes

No hay comentarios.:
Publicar un comentario